Te vi corriendo, con una mochila pesada, y una maleta que llevabas detrás..
la cargabas de costado, la empujabas..
Estabas pálido, y sombrío, parecías asustado
Recordé una noche de lluvia..
Me sonó a la misma expresión,
donde solo distinguía tus facciones cuando el cielo se iluminaba con los relámpagos.
y nosotros ahí...
mojándonos bajo la noche de tormenta.
Hacia frío, aunque era primavera
siempre hace frío en esos momentos...
y no hablabas, nunca te había visto tan clamado, tan callado..
recuerdo que la lluvia disimulaba mis lágrimas, lo que me dejaba mirarte a la cara sin avergonzarme.
Pero no vi nada, aunque los relámpagos duraran muchísimo mas tiempo para iluminarte
no podía ver nada, esa noche no veía nada mas allá de vos...
Esta noche, no llovía, era invierno, y hacia frío..
Vi tu frío, sentí el vacío helado...
No te concentrabas en mi, ni notaste que estaba ahí, mirándote, al lado tuyo..
Aun así vi el egoísmo, el reproche, la humillación, sobretodo eso ultimo..
fue lo que mas me dolió..
humillarse
vi miedo, pero a la vez ansiedad..
vi odio, pero también entendimiento..
Vi como te alejabas, pero volteando constantemente hacia atrás.
Quería gritarte, <no mires mas para atrás> pero era injusto, mas egoísta todavía
Sonreíste..
No se si fue por resignación, por humanidad, o por una especie de telepatía.
Entonces sentí que todo iba a estar bien...
Solo duro unos segundos.. Pero lo sentí..
Subiste al tren, luego de empujar la maleta delante. y saltaste con mas resignación.
Te sentaste contra la ventanilla y mirabas la profunda y fría noche, mirabas las sombras de la luna, como hipnotizado, como si estuvieras revelando los secretos mas ocultos del universos.
Como si descubrieras los misterios que trae guardado aquel astro. Y sonreíste de nuevo.
O al menos eso me pareció a mí.
Entonces sonó mi tren. El que estaba enfrente.
Yo no llevaba nada, solo una pequeña mochila. Con unos libros y un cuaderno.
Subí despacio, para observar cuando salía tu tren..
Te vi con miedo. Con ansiedad.
Te vi odiándome y queriéndome,
Te vi olvidándome y recordándome.
No te vi entendiéndome,
Pero te vi sonreír,
y te vi continuar,
avanzar..
soñando..
Y yo también sonreí.
Y la niebla se incrementó, el tren ya se había ido,
el ultimo..
Y yo…
antes de que arrancara el mío
me baje..
y seguí a pie..
en dirección contraria a la tuya,
quien sabe a donde...
quien sabe porque...
[y quien sabe porque comenzó a llover de repente…]
